Limericks de Edward Lear
«Había un viejo señor de Coblenza / cuyas piernas eran de longitud inmensa. / Un paso era la distancia / entre Turquía y Francia / Para este sorprendente señor de Coblenza.» Reproducimos varios limericks de A Book of Nonsense, de Edward Lear, en inglés y en castellano (según traducción de Elías Gallo). (Ver también la sección Reseñas de Libros.)Para acompañar el comentario sobre el libro El cuento de los cuatro niños que dieron la vuelta al mundo (y algunos limericks) , de Edward Lear —que realizó Marcela Carranza en la sección “Reseñas de libros”—, reproducimos algunos de los limericks que Lear incluyó en su libro A Book of Nonsense (1).
A continuación, cada limerick se presenta en su versión original en inglés (2) , seguida de la versión en español de Elías Gallo (3).
There was an Old Man of Moldavia,
Who had de most curious behaviour
For while he was able,
He slept on a table,
That funny Old Man of Moldavia.
Había un viejo señor de Moldavia
cuya conducta era de lo más extraña:
mientras tuvo fuerza
durmió en una mesa
este curioso señor de Moldavia.
—000—
There was an Old Person of Buda,
Whose conduct grew ruder and ruder;
Till at last with a hammer,
they silenced his clamour,
By smashing that person of Buda.
Había una vieja persona de Buda
cuya conducta era cada vez más ruda
Hasta que a martillazos
acallaron sus gritos
aplastando a este hombre de Buda.
—000—
There was a Young Person of Crete,
Whose toilette was far from complete;
She dressed in a sack,
Spickle-speckled with black,
That ombliferous person of Crete.
Había una joven persona de Creta
cuya toilette no era nada completa.
Vestía un bolsón
moteado de marrón
esta increíble persona de Creta.
—000—
There was an Old Person of Cromer,
Who stood on one leg to read Homer;
When he found he grew stiff,
He jumped over the cliff,
Which concluded that Person of Cromer.
Había un viejo señor de Cromero
que se puso en un pie para leer a Homero.
Hasta que se quedó duro
y se cayó de un muro,
lo que concluyó con el señor de Cromero.
—000—
There was an Old Man of Coblenz,
The length of whose legs was immense;
He went with one prance
From Turkey to France,
That surprising Old Man of Coblenz.
Había un viejo señor de Coblenza
cuyas piernas eran de longitud inmensa.
Un paso era la distancia
entre Turquía y Francia
Para este sorprendente señor de Coblenza.
—000—
There was an Old Person of Spain,
Who hated all trouble and pain;
So he sat on a chair,
With his feet in the air,
That umbrageous Old Person of Spain.
Había un viejo señor en España
que de las molestias huía con maña.
Se sentaba al desgaire
con los pies en el aire
este umbrático señor en España.
—000—
There was an Old Man who said, ‘¡Well!
Will nobody answer this bell?
I have pulled day and night,
Till my hair has grown white,
But nobody answers this bell!’
Decía un viejo señor desesperado:
¿Nadie vendrá a contestar mi llamado?
Llamó noche y día
y ya encanecía,
pero nadie vino a contestar el llamado.
Notas
(1) A Book of Nonsense fue publicado por primera vez en 1846. El libro contaba con setenta y dos limericks distribuidos en dos volúmenes. Como era costumbre en la época respecto a los libros para niños el nombre del autor no figuraba en esta edición (Lear utilizó el seudónimo “Derry Down Derry”. En el año 1861 el libro fue editado por tercera vez, ahora sí con el nombre de Lear en la tapa. Este libro contenía 112 limericks, pero en él se descartaron tres de la primera edición. Para saber más sobre Edward Lear y su obra recomendamos visitar el sitio Edward Lear Home Page.
(2) Tomada de A Book of Nonsense, publicado en la mencionada Edward Lear Home Page.
(3) Tomada de “Limericks de Edward Lear”. En: El libro del humor absurdo. Selección y notas de Eduardo Stilman. Buenos Aires, Ediciones Siglo Veinte, 1967.
Artículos relacionados:
Lecturas: Edward Lear, los limericks, y el Zoo Loco de María Elena Walsh, por Marcela Carranza.
Autores: María Elena Walsh (1930-2011).
20/4/11 a las 20:09
a veces disfruto mucho de hacer limericks y otras humoradas. Sana el espíritu y rimar y jugar un poco con el espíritu jguetón que habita en nosotros
20/4/11 a las 20:10
a veces disfruto mucho de hacer limericks y otras humoradas. Sana el espíritu rimar y jugar un poco con el espíritu juguetón que habita en nosotros
5/5/15 a las 16:38
Me encantan estas lecturas
llenas de imaginacion y cultura
sería bueno que a la gente se le ocurra
optar por estas y tener una mente mas pura.