39 | RESEÑAS DE LIBROS | 29 de noviembre de 2000

Colección Luna Grande

  • La gata Galleta y Lara y el duende
  • Un pichón difícil y Bichos importantes
  • La ovejita 100 y Aventuras de Tuk
  • Inestable, el caracol y El ratón García
  • La cigüeña Lorenza y El fantasma asustado
  • El dinosaurio Carmelito y Fofo y la sirena

Textos de Ricardo Mariño.
Ilustraciones de Marcelo Elizalde.
Buenos Aires, Editorial Sigmar, 2000.

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Los chicos que están dando sus primeros pasos en la lectura por cuenta propia tienen en la colección Luna Grande una veta magnífica para alimentar el espíritu con buenos cuentos. Los adultos buscadores de historias para leer a los más pequeños también agradecerán la aparición de estos libros.

A partir de personajes y situaciones muy cercanas al mundo de los niños, Ricardo Mariño ha elaborado historias dinámicas, divertidas y con desenlaces sumamente originales.

El tono humorístico y los equívocos son elementos comunes a todas ellas. En "El dinosaurio Carmelito", un bebé dinosaurio rompe el cascarón y no encuentra a su madre por ninguna parte. Cuando sale en su búsqueda, primero la confunde con una gallina y luego con un tren, para finalmente encontrarla y abrazarla al enterarse que ambos se estaban buscando. "Aventuras de Tuk" es la historia de un perro actor —estrella de cine de acción— que un día, al visitar la selva, se ve obligado por las circunstancias a enfrentarse con peligros que no son de ficción.

Varias de las historias parten de lo cotidiano y se disparan a lo fantástico, como en "La ovejita 100" donde se cuenta lo que le ocurre a una familia compuesta por una mamá y sus dos hijas que, todas las noches, "se dormían contando cien ovejitas del mismo rebaño". El problema surge cuando una noche la ovejita número 100 (con la que alcanzaban el sueño) se pierde en la oreja de la perra Afra y ninguna puede dormirse. O en "Lara y el duende", la pequeña protagonista tiene que interrumpir sus tareas escolares para ayudar a un duende a cumplir una misión.

Fantasmas que se asustan hasta que aprenden a asustar, cigueñas que cumplen con el sueño de llevar y traer a los bebés, sirenas que tienen amores imposibles, gatos y perros que se odian a muerte pero que pueden ser buenos padres adoptivos, son algunos otros personajes de estos cuentos.

Las ilustraciones de Marcelo Elizalde son una grata compañía para los textos de Mariño. La gracia narrativa encuentra su equivalente en la imagen, que también hace su propio aporte lúdico. A través de ellas, personajes y ambientes se materializan plásticamente ante los ojos del lector. Elizalde, un profesional de larga trayectoria en el género, encuentra el tono justo para transformar a cada historia en un hermoso cuento ilustrado.

Este comentario quedaría incompleto si no hiciéramos referencia al aspecto físico de estos libros. Cada título contiene dos cuentos, presentados en un formato sencillo, económico y muy "amigable" si pensamos en un destinatario pequeño. La tipografía elegida, en mayúsculas y similar a la que se emplea en los comics (menos "dura" que la acostumbrada en otras experiencias editoriales en ese sentido), es una ayuda para los "lectores principiantes".

En síntesis, los libros de la colección Luna Grande cumplen holgadamente con una premisa sencilla pero fundamental: proporcionar un momento de lectura placentera. Y eso no es poca cosa.

Recomendados a partir de los 5 años.

Roberto Sotelo

 


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Autores: Ricardo Mariño